2001: otra ODISEA

no somos ordenadores, somos físicos Roy Batty El viaje El capitán de la expedición David Bowman se encontraba lejos, muy lejos de los recientes acontecimientos. Inmerso en un universo multicolor de vidrieras góticas, flotando en un concierto de rombos, triángulos, pirámides, cubos... Rodeado de diminutas visiones de color en movimiento había emprendido un camino que iba más allá, más lejos de lo que puede llegar cualquier nave espacial. Embriagado en un delirio de grandeza David Bowman era Dios, al menos se sentía como tal. El rescate Tardó varios meses en llegar la nave de rescate al lugar de los sucesos. Solamente fue necesaria una breve maniobra para que la nave se acoplara a la Discovery. Tras el desembarco la expedición encontró al Capitán David Newman flotando dentro de la nave con una sonrisa de oreja a oreja y al resto de la tripulación sin vida. El ordenador de abordo estaba inerte. Alguien lo había desconectado de forma manual lo cual era verdaderame