Suiza aprueba en referéndum el pasaporte Covid
Consejero de sanidad de Andalucía
Dice la leyenda que corría el año tal cuando el ridículo rey de un minúsculo país sufrió un enorme brote de locura. Durante una noche cualquiera, inmerso entre anhelos de grandeza, el ridículo monarca tuvo la ocurrencia de secuestrar a toda la población. Al día siguiente, los ciudadanos del país fueron conducidos a una gran prisión donde permanecieron durante meses. Un día, el monarca ofreció a sus súbditos recuperar la antigua libertad a cambio de tomar una copita de Marie Brizard. Cada centímetro de la prisión tembló al son de las palabras del monarca:
¡¡¡La libertad es beber Marie Brizard!!!
¡¡¡La libertad es beber Marie Brizard!!!
Tras la ingesta masiva del anisete por parte de la población secuestrada sucedieron tres cosas. Una pequeña porción de la ciudadanía no tomó la copita de licor. El grupo de no bebedores fue trasladado a otra prisión. El rey-cabrón incumplió su parte del trato; los súbditos que cedieron al capricho del rey continuaron presos entre las cuatro paredes.
A los pocos días de la segregación, el rey-cabrón volvió a hacer una propuesta a cambio de la libertad; pero esta vez, sólo se dirigió a la población prisionera que tomó el licor. En la prisión de la ciudadanía no bebedora el rey cabrón colocó una potente bomba que sólo esperaba el momento de explotar. El grupo que bebió el licor lograría su libertad si hacía estallar la carga explosiva con un detonador que se encontraba en su prisión.
Transcurridos un par de minutos la prisión de los no bebedores estalló desintegrandose en diez mil pedazos. Sin embargo, de nuevo, el monarca incumplió su parte del trato. El grupo de súbditos-bebedores-bomberos continuó prisionero entre los cuatro muros de siempre.
Dicen algunos estudiosos del tema que la historia original era mayor. Que incluía hordas de jubilados cazando adolescentes y la resurrección del rey Herodes. En todo caso, cuentan los rumores que todavía hoy existe una prisión en un minúsculo país donde los súbditos de un ridículo rey cabrón siguen esperando la próxima oferta…
de la biblioteca de leyendas marcianas
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Hace unos días, una muy buena amiga me envió un correo con motivo de la votación del pasaporte COVID en Suiza. Este correo llegó cargado de incredulidad ante los resultados favorables a las medidas COVID. Y aquí estoy tratando de analizar los resultados de la votación.
Como era de esperar, el resultado favorable a la discriminación de una parte de la población suiza lo celebraron los medios oficiales del país con gran alborozo:
Suiza vota a favor del pasaporte COVID
Los suizos dan un gran “sí” a la Ley COVID y reconocen con ello el certificado sanitario como instrumento para luchar contra la pandemia.
Hay que tener muy buenas razones para votar a favor de un pasaporte COVID que, sencillamente, consiste en la legalización de medidas de segregación social. Un apartheid para las personas no vacunadas. En Suiza, sólo estar vacunado asegura la posesión de un pasaporte COVID que autorice la entrada libre a restaurantes, a eventos de más de mil personas o participar en actividades deportivas o culturales con más de 30 participantes.
Como deberían de existir razones incontestables para justificar la discriminación de una minoría (los no vacunados) trataré de comprender a esa mayoría de ciudadanos suizos que han decidido que existen ciudadanos de primera y ciudadanos de segunda. Para ello he estado buscando y leyendo comentarios dejados en páginas web de ciudadanos/as suizos/as favorables a la discriminación de sus vecinos y vecinas. Comentarios como el que sigue:
Un viejo refrán dice: "Tu derecho a mover los brazos termina justo donde empieza la nariz del otro". A la luz de la rápida propagación de la variante delta, y de una posiblemente aún más rápida de omicrón, creo que como ciudadano tengo todo el derecho a no contagiarme de alguien que se negó a vacunarse. A la luz de esto lo de vacunarse o no ya no es una elección puramente "personal". Y que quede claro, no hay ninguna base científica para rechazar vacunas que ya han demostrado ser seguras y eficaces.
Este comentario, como otros, contiene tres mensajes que difunden los "expertos". Lo que nos da una primera explicación del apoyo de una mayoría de la población suiza a medidas discriminatorias. La mayor parte de los ciudadanos suizos, y del mundo, han decidido “informarse” a través de medios oficiales descartando cualquier otra fuente de información.
Mensajes de los "expertos":
1) Los no vacunados contagian a las personas vacunadas.
2) las vacunas han demostrado científicamente que son seguras y eficaces
3) No hay pruebas científicas para rechazar la vacuna.
Una vez que sabemos que gran parte de la población europea es un eco que padece de una compulsión a la repetición. Un eco que repite y repite y repite, ite, ite, ..., lo que oye en determinados medios, rechazando lo que dicen otras fuentes de información, trataré de examinar los mensajes de los "expertos" punto tras punto:
1) Los expertos tienen razón cuando afirman que los no vacunados contagian. Lo que les falta decir a los expertos es que los vacunados también contagian. Que la frase de “tu libertad acaba donde comienza la mía”, en este caso, sólo expresa una exigencia tan solidaria como el derecho al monopolio del contagio por parte de las personas vacunadas.
Bibliografía:
The epidemiological relevance of the COVID-19-vaccinated population is increasing
Se esperaba que las altas tasas de vacunación contra COVID-19 redujeran la transmisión del SARS-CoV-2 en las poblaciones al reducir el número de posibles fuentes de transmisión y, por lo tanto, reducir la carga de la enfermedad COVID-19. Sin embargo, datos recientes indican que la relevancia epidemiológica de las personas vacunadas con COVID-19 está aumentando. En el Reino Unido se describió que las tasas de ataque secundario entre los contactos domésticos expuestos a casos índice completamente vacunados eran similares a los de los contactos domésticos expuestos a casos índice no vacunados (25% para los vacunados frente al 23% para los no vacunados). 12 de 31 infecciones en contactos domésticos completamente vacunados (39%) surgieron de casos índice vinculados epidemiológicamente completamente vacunados. La carga viral máxima no difirió según el estado de vacunación o el tipo de variante. En Alemania, la tasa de casos sintomáticos de COVID-19 entre los completamente vacunados ("infecciones intercurrentes") se informa semanalmente desde el 21 de julio de 2021 y era del 16,9% en ese momento entre los pacientes de 60 años o más. Esta proporción aumenta semana a semana y era del 58,9% el 27 de octubre de 2021 lo que proporciona una clara evidencia de la creciente relevancia de los vacunados completos como posible fuente de transmisión.
Transmission potential of vaccinated and unvaccinated persons infected with the SARS-CoV-2 Delta variant in a federal prison, July—August 2021
Conclusiones A medida que este campo continúa desarrollándose, los médicos y los profesionales de la salud pública deben considerar que las personas vacunadas que se infectan con el SARS-CoV-2 no son menos infecciosas que las personas no vacunadas. Estos hallazgos son de vital importancia, especialmente en entornos colectivos donde la transmisión viral puede provocar grandes brotes.
3) Paso al punto 3, saltándome el 2, ya que la cuestión de probar en ciencia tiene su miga. Se dice en el comentario que “no hay ninguna base científica para rechazar las vacunas”. Esta afirmación por si sola es una editorial del mundo en el que vivimos. La carga de la prueba está en los mercaderes y sus aliados. Son las empresas que han introducido un producto nuevo al mercado las que tienen que demostrar que es, al menos, inocuo.
Tengo derecho a la duda y a la discrepancia. La duda es parte del método de la ciencia. Corresponde a los mercaderes y a sus aliados probar que sus afirmaciones son ciertas. Si hablamos de ciencia, no corresponde a las personas que dudan demostrar que las hadas no existen; la carga de la prueba está en las personas que afirman su existencia. Las vacunas COVID no son una excepción a esta regla si hablamos de ciencia.
La última vez que traté el tema de la pandemia tomé la decisión de no dar ninguna referencia directa de las fuentes que utilizo y voy a mantener esa decisión. Por tanto, las afirmaciones que siguen no están acompañadas de ningún enlace y las referencias bibliográficas serán mínimas. La carga de la prueba se encuentra en otro lado. Pasamos al punto 2.
2) En Suiza, como en el resto de Europa de influencia no-rusa, las vacunas empleadas mayoritariamente son estas: Johnson & Johnson (COVID-19 Vaccine Janssen®), Pfizer/BioNTech (Comirnaty®), Moderna (Spikevax®). Desde este momento cuando utilice el término vacunas en general me estaré refiriendo a estas tres.
los ensayos clínicos
Cuando comenzaron los ensayos clínicos de las vacunas COVID el Ministerio de Sanidad español nos tranquilizó con la siguiente información:
Los ensayos clínicos se clasifican en cuatro fases:
Ensayo clínico de Fase I, donde se comprueba inicialmente que el fármaco es seguro.
Ensayo clínico de Fase II, donde se empieza a comprobar si el fármaco funciona como se esperaba y se realiza una búsqueda de la dosis más adecuada y del intervalo entre dosis.
Ensayo clínico de Fase III, se verifican de forma robusta los aspectos de seguridad y eficacia del fármaco.
Ensayo clínico de Fase IV o estudios de seguimiento, se examinan los efectos a largo plazo una vez el medicamento se ha comercializado.
En la documentación sobre la estrategia de vacunación el Ministerio de Sanidad español respecto a las vacunas se dice:
El desarrollo de cualquier vacuna abarca diferentes fases. Inicialmente se desarrolla una fase exploratoria y preclínica con estudios en animales de laboratorio. A continuación, se inician los ensayos clínicos en humanos fase I, II y III para determinarla dosis óptima, explorar la seguridad inicial y caracterizar el perfil de eficacia y seguridad.
La agencia reguladora europea autoriza el uso de las vacunas COVID de forma provisional por dos motivos: la Fase III está incompleta, faltan datos, y existe una situación de emergencia sanitaria. El segundo motivo no lo voy a tratar.
Como hemos visto en palabras del Ministerio de Sanidad, la Fase III es clave para lograr una verificación robusta de la seguridad y eficacia de las vacunas. Sin embrago entre diciembre (2020) y enero (2021) las farmacéuticas terminan con la Fase III sin completarla, en algún caso a falta de dos años para finalizar la Fase III. Dicen las farmacéuticas que como las vacunas funcionan ya no hace falta evaluar las vacunas. Las agencias reguladoras callan.
Roto el ensayo clínico, “el estándar de oro de la investigación médica”, sin Fase III, nos encontramos en manos de los estadísticos. Bajo el hechizo de “lo dice la ciencia”. Perdidos para siempre los datos de la fase III del ensayo clínico, las otras evidencias respecto a la eficacia y seguridad de las vacunas son y serán, al menos, discutibles y ya están siendo cuestionadas:
A primera vista, los datos de la OMS sugieren que, en cada uno de los grupos de mayor edad, la mortalidad por todas las causas es menor en los vacunados que en los no vacunados. A pesar de esta evidencia aparente que respalda la efectividad de la vacuna, al menos para los grupos de mayor edad, en una inspección más cercana de estos datos, esta conclusión se pone en duda debido a una variedad de inconsistencias y anomalías fundamentales en los datos. Cualesquiera que sean las explicaciones de los datos observados, está claro que son poco fiables y engañosos.
Martin Neil. Queen Mary, University of London QMUL · School of Electronic Engineering and Computer Science. Et al.
Además, el 4 de noviembre de 2021 un trabajo de investigación sobre el ensayo clínico de la vacuna de Pzifer dejó en evidencia el papel de las agencias reguladoras. Los resultados de la investigación publicados en una revista científica señalan que los datos aportados por Pzifer para la autorización provisional de su vacuna pueden ser erróneos. Estos hechos fueron denunciados en su momento por trabajadores de la farmacéutica. El resultado fue el despido de los trabajadores "chivatos" al mismo tiempo que las agencias reguladoras ignoraron sus denuncias.
Israel
Los gobiernos y los "expertos" ofrecieron durante el transcurso de 2020 la "libertad" a cambio de la vacunación. Sin embargo las medidas de control social no paran, las olas de casos se suceden y del 95% de eficacia (lo que significara ésto) hemos pasado a la tercera dosis, por ahora.
El caso de Israel es un buen ejemplo para explorar la eficacia de la vacuna Pzifer. La propia farmacéutica ha considerado a este país como un “experimento” sobre la eficacia de su producto en condiciones reales. De este "experimento", con una población prácticamente vacunada, no han dejado de brotar malas noticias tras un inicio esperanzador:
Israel, ampliamente vacunado, sufre otra oleada de Covid-19. El país ofrece más inyecciones de refuerzo, restaura los mandatos de mascarilla y cuarentena a medida que la variante Delta aumenta las hospitalizaciones
El estudio israelí Health Payor revela que la eficacia de la vacuna de ARNm de Pfizer disminuye enormemente para los mayores de 60 años a los 4,8 meses
Israel tiene uno de los niveles más altos de vacunación contra COVID-19 del mundo, con el 78% de los mayores de 12 años completamente vacunados, la gran mayoría con la vacuna Pfizer. Sin embargo, el país registra ahora una de las tasas de infección más altas del mundo, con casi 650 nuevos casos diarios por millón de personas. Más de la mitad están en personas completamente vacunadas, lo que subraya la extraordinaria transmisibilidad de la variante Delta y aviva la preocupación de que los beneficios de la vacunación disminuyan con el tiempo.
A pesar de que está comenzando una campaña de vacunación para niños de entre cinco y once años, esto no detendrá un nuevo ataque de COVID-19. TrialSite está monitoreando múltiples centros de salud en Israel para determinar la efectividad de este último programa de refuerzo masivo. Los nuevos casos se dispararon, casi se duplicaron el lunes 22 de noviembre. Si esta tendencia continúa, se deben plantear de inmediato serias dudas sobre la vacunación masiva.
Hasta aquí lo que dice la prensa y la ciencia oficial sobre el "experimento" israelí, que probablemente sea cierto. Como también es cierto que, recurriendo a los gráficos de Euro Momo, los datos de mortalidad en Israel antes y después del inicio de la vacunación no parecen muy diferentes. Bueno, quizás si hay diferencias.
La vacunación comienza en la semana 50 de 2020:
La reencarnación del rey cabrón
Retomando la aprobación del pasaporte COVID en Suiza la realidad no es diferente al resto de los países de Europa occidental.
Gran parte de la población cree o quiere creer que no contagia aunque contagia.
Gran parte de la población pide a los no vacunados que se vacunen por "solidaridad", pasando por alto que la población vacunada también es un vector de contagio.
Gran parte de la población se siente solidaria amargándole la vida a las personas no vacunadas.
Gran parte de la población da por hecho que las vacunas están testadas: lo dicen en la tele lo repiten los "verificadores".
Gran parte de la población no exige pruebas a los "expertos" ni a los "verificadores": confía en el testimonio de los "expertos". Aunque un testimonio pueda ser una evidencia religiosa, nunca es una evidencia científica.
¿Cómo se ha llegado a esto?
Corre un rumor que afirma que la actual sin-razón probablemente se deba a una nueva reencarnación en la Tierra del rey cabrón.
Aquí lo dejo.
Gracias José por hacerte eco de la noticia y por profundizar en ella.
ResponderEliminarUn abrazo.
Por cierto el consejero este tiene un don de palabra apabullante. Supongo que aunque no se le entienda, él sigue hablando, por si cuela...
Sobre el consejero de sanidad de Andalucía, es sólo un ejemplo de los "expertos" en los que mucha gente ha depositado su fe. Una garantía para la salud de cualquiera, sin duda.
EliminarDe todo este tiempo oscuro que parece que no tener final algo bueno he sacado. Las cervezas entre amigos saben mejor que antes; si a la autoridad sanitaria no le gusta el tema (pasaporte covid) pues las tomaremos en casa, y si a la autoridad sanitaria tampoco le gusta esto... encontraremos la forma de mantener una amistad cara a cara (ya tenemos experiencia).
Una abrazo y otro para Pedro, que andará por ahí.
Gracias !!! Confiemos en que nunca llegue ese momento...no sé cuantas vueltas de tuerca serán necesarias para que la gente despierte de una vez. No pierdo la esperanza.
ResponderEliminarTodavía le queda hilo a esta estafa. Ya veremos lo que dura...
EliminarUn saludo