GESTALT Y LA INTRPRETACIÓN DE LOS SUEÑOS



La terapia Gestalt fue desarrollada por Fritz Perls en la década de 1950. Se fundamenta se en la idea de que la atención consciente al momento presente es esencial para el crecimiento y la resolución de problemas emocionales. Algunos de los principios clave de la terapia Gestalt incluyen el enfoque en la conciencia de la experiencia presente, la responsabilidad personal, la autenticidad y la importancia de la relación terapéutica. Además, la Gestalt se centra en la integración de las partes fragmentadas del paciente para lograr una mayor coherencia, autoaceptación y autenticidad.

LA TERAPIA GESTALT Y LOS SUEÑOS

Para la Gestalt los sueños son una oportunidad para explorar aspectos inconscientes de la experiencia personal, una oportunidad para crecer.

La terapia Gestalt se centra en la experiencia inmediata y en la toma de conciencia del "aquí y ahora". En la interpretación de los sueños, esto significa prestar atención a las emociones y sensaciones que se experimentan en el sueño, en lugar de analizar el sueño desde una perspectiva puramente simbólica. Se anima a hablar en primera persona y a presentar los elementos del sueño como si fueran parte de la experiencia presente. Por ejemplo, en lugar de decir "Soñé que estaba en un bosque", se dirá "Estoy en un bosque". Esto ayuda a traer la experiencia del sueño al presente y a tomar conciencia de las emociones y sensaciones asociadas con el sueño.

Se trabaja en la integración de partes fragmentadas de la personalidad. En la interpretación de los sueños, se identifican los diferentes elementos y personajes del sueño como partes de uno mismo, por ejemplo: “soy el bosque”, tratando de unificarlos y comprender su significado en relación con la experiencia del soñador. 

En el trabajo con los sueños la Gestalt busca resolver los conflictos internos y fomentar la autorregulación. Esto se relaciona con la idea de que los sueños pueden servir como una forma de procesar conflictos internos y la terapia Gestalt ofrece una vía para explorarlos. Se anima a los pacientes a explorar las partes de un sueño que puedan sentirse inacabadas o que generen conflicto. Esto puede incluir interactuar con personajes o elementos del sueño para entender mejor su significado o resolver conflictos internos que puedan surgir.

Por tanto, la terapia Gestalt utiliza un enfoque centrado en la experiencia, la autorreflexión y la exploración de las partes del sueño, de las dinámicas incompletas, sin culminar, para ayudar a los pacientes a comprender y dar sentido a sus sueños.

Un aspecto fundamental en el trabajo con la Gestalt, que comparte con las terapias humanistas, es la confianza plena en las capacidades del paciente. El terapeuta es sólo un acompañante de la experiencia del paciente, por tanto, a diferencia del psicoanálisis freudiano, el terapeuta no interpreta. El paciente es un ser completo, adulto, que no depende de la interpretación del "experto" para profundizar en el conocimiento de su propia experiencia.

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